martes, 6 de septiembre de 2011

Capítulo 3

Durante el viaje a Sydney estuve pensando en todo lo sucedido, no podía creer como había cambiado todo en tan pocas horas. Mi pensamiento hacia mi padre era totalmente diferente, porque ya se había descubierto que quien había acabado con su matrimonio era mi madre, al engañar a mi padre.
También mi novio me decepcionó mucho al engañarme con mi propia madre, aunque ya debería de haberme dado cuenta cuando solo pensaba en hacerlo, pero el había sido mi primer novio, al que había besado, con el que había tenido algo más, el que se había fijado en mí.
 Pero eso ahora en este nuevo lugar tendría que cambiar, estaba dispuesta a hacerme un cambio de look , a no ser tan tímida,a cambiar en todos los aspectos.
Cuando estábamos en el avión decidí hablar con mi padre porque a partir de ahora quería que nuestra relación cambiase, que lo que había sucedido hasta ahora quedase olvidado.
-Papá, siento todo lo sucedido, nunca pensé que mi madre había mentido sobre su infidelidad, que te echaría la culpa a ti, por este error he estado separada de ti durante un año.- me sentía triste al decir estas palabras y casi rompí a llorar, porque se que le había hecho daño todo esto.
-No te preocupes mi amor todo ha pasado y ya quedará olvidado, solo miraba por tu bien, pensaba que estando con tu madre podrías convivir mejor pero me equivocaba, pero menos mal que lo hemos podido arreglar a tiempo.
Cuando dijo esto, me abrazé a mi padre y me quedé todo el viaje apoyada en él intentando dormir.
 Al llegar a Sydney me quedé perpleja por como era la ciudad, nunca había visto una cosa igual, sabía que me gustaría mucho vivir allí, que a partir de ahora las cosas iban a cambiar mucho y que este sería mi hogar.
Cogimos un taxi que nos llevó a un barrio muy  moderno, con un grupo de casas todas con un gran jardín, una piscina por detrás, las fachadas algunas eran de madera, otras con un estilo muy moderno y poco a poco el taxi iba más despacio hasta que nos dejó en una gran mansión.
Nos bajamos del taxi y mi padre me presentó a la que sería mi nueva casa. Yo sabía que mi padre tenía un buen trabajo, era arquitecto, pero no pensaba que viviera en esta grandiosidad de casa.
-Alyson hemos llegado a tu nueva casa, espero que te guste, la construí en cuanto llegué por aquí.
Yo no podía decir nada estaba todavía sorprendida, nunca podría pensar que viviría en esta mansión, ni en mis mejores sueños.
Así que mi padre abrió la puerta de la casa y me enseñó todo. Por dentro estaba todo mucho mejor, más decorado, con un gran salón, una tele de las más nuevas, tenía tres cuartos de baño, tres plantas. 
En la planta baja también se encontraba la cocina, muy grande también todo de acero, con un estilo moderno,  en la planta de arriba estaban las habitaciones, mi padre tenía una gran habitación con cosas de su trabajo.
También había tres habitaciones mas y la mía, que para mi era la más bonita. Estaba pintada de color rosa y azul mis colores favoritos, una cama muy grande, también tenía un ordenador portátil en la mesita, y una tele, que siempre había querido tener en mi casa, dentro de la habitación se encontraba un cuarto de baño para mi sola. Tenía una gran bañera con chorros a los lados y un gran armario para meter mi ropa, aunque no tenía mucha. 
Y en la planta más alta se encontraba una gran azotea, una cámara y otro cuarto de baño.
Cuando vi todo aquello, bajé corriendo a buscar a mi padre.
-Papá, esta casa esta chulísima, no puedo creer que hayas hecho esto tu solo. ¡Me encanta!
-Sabía que te iba a gustar mi amor, lo hice pensando en ti. Prepárate pronto que vamos a ir al centro comercial que vamos a renovar tu armario.
-Muchas gracias papa, espérate que siga viendo la casa y ahora nos vamos.
Fui hasta la zona que más me interesaba ver. El jardín era como un laberinto, todo verde, el césped bien cortado, rodeado de una multitud de plantas, rosas y al fondo se encontraba la piscina.
Era muy grande, y muy honda. A mi me encantaba nadar, en mi colegio siempre iba a natación y era una de las mejores, pero cuando empecé a salir con Cristopher lo dejé.
Cuando terminé de ver la piscina mi padre vino a por mi y me llevó al garaje donde tenía su coche. Era un descapotable azul, mi preferido y tenía tres coches más.
-Alyson, este coche quiero que sea para ti, lo compré hace unos meses esperando que algún día vinieras a verme.- yo me quedé muy sorprendida, nunca había pensado en tener un coche y tampoco en cogerlo.
-Me encanta en serio papa, pronto lo cogeré, gracias por todo lo que estás haciendo por mi.
Esa tarde me la pasé en el centro comercial comprándome ropa, mi padre era el que me animaba a comprármela porque ami me daba un poco de verguenza pedirle ropa.
Nos sentamos un rato en una cafetería que había en el centro comercial y mi padre empezó a hablar conmigo.
-Ahora que estas viviendo aquí tendrás que ir a algún sitio a estudiar ¿no?-dijo mi padre
-Por supuesto, yo tengo pensado estudiar en la universidad el año que viene.- yo era muy estudiosa y no se me había pasado por la cabeza dejar de estudiar.
-Resulta Alyson que me gustaría que fueras a  un internado que te prepara muy bien para la universidad, y es considerado el mejor de Sdyney, pensaba que te iría muy bien allí. Empezarías mañana si tu quieres.- yo estaba super contenta, era mi ilusión ir a un internado y más para mejorar mi nivel, porque yo era muy exigente conmigo misma en ese aspecto.
-Claro papa que me gustaría ir, es mi ilusión, estaré encantada, ¿pero tengo que llevar uniforme?
-Si esa es otra cosa, por eso también te había traido aquí por si aceptabas ir al internado comprarte el uniforme, te gustará mucho. Yo de pequeño también estuve en este internado y es de lo mejor, conocerás a mucha gente, pero solo te dejan salir a partir de los viernes, aunque cuando quieras venir a visitarme o yo ir te dejarán salir, no te preocupes por eso.
Me sentía inmensamente feliz, todo lo que me estaba pasando, seguía sin poder creérmelo, vivir en Sydney, en una mansión, ir al mejor internado.
Este año todo iba a cambiar.
Así que cuando compramos el uniforme que por cierto era de los que siempre me había imaginado, con una falda muy corta, una camisa blanca abierta y unas botas, nos fuimos para la casa.
Cuando fuimos a comer, llamaron a la puerta y mi padre se sorprendió porque no esperaba visita, así que fui a ver quien era.
Era una mujer muy guapa, rubia, con un buen tipo, con ropa de marca y preguntaba por mi padre, así que lo llame, pensaba que era alguien del trabajo, pero cuando mi padre la vió se quedó parado.
-Lucie, ¿qué haces aquí?, no esperaba verte esta noche, te dije que mi hija vendría hoy.- así que mi padre le había hablado de mi, ¿quién sería esa mujer?
-Lo siento, pasaba por aquí y vine a verte, como llevaba dos días sin verte, pero haber ya que estoy aquí preséntame a tu hija, tengo unas ganas tremendas de conocerla.- mi padre estaba tan sorprendido de verla como yo.
-Claro que te la presento Lucie, esta es mi hija Alyson, acaba de llegar y vivirá a partir de ahora conmigo. 
Alyson, esta es mi amiga Lucie.-Lucie estaba un poco decepcionada no se si sería porque me iba a quedar a vivir con mi padre o porque solo había dicho amiga.
-Perdona que te corrija Leo, pero somos más que amigos, te recuerdo que hace poco estuvimos juntos.
Mi padre se quedó un poco en verguenza, pero al final dijo:
-Bueno todavía es pronto para decir esto, pero sí, si estamos empezando a salir Alyson, espero que la conozcas mejor.
Yo no podía responder nada, no podía creer que mi padre tuviera novia, la verdad no me lo esperaba.
Así que salí corriendo para irme a encerrarme a mi cuarto, no quería saber nada esta noche.
Mi padre vino corriendo en busca mía para ver que me pasaba, pero yo no quise hablar con él, estuvo llamando un montón de veces a mi cuarto, pero no le abrí.
A la mañana siguiente, me puse mi uniforme para irme al internado y cuando bajé a la cocina mi padre estaba esperándome, me supongo que tuvo que pasar la noche mal porque no quería que volviera a estar enfadado con el, después de lo último que pasó.
-Cariño siento mucho lo sucedido, no quería que te enterases así, solo estamos conociéndonos.
-No pasa nada papa, te entiendo, te has divorciado y tu quieres empezar una nueva vida y tienes todo el derecho del mundo, siento haberme ido así, no tiene disculpa.- sentí haberme comportado así, pero no estaba preparada todavía para que mi padre tuviera una nueva novia.
-Te entiendo cariño, y gracias por apoyarme y comprenderme, espero que os lleveis bien. Pero ahora tenemos que irnos para el internado, es tu primer día.
Me peiné y me dejé el pelo ondulado, yo siempre lo tenía liso pero quería cambiar y quería dar una buena impresión al llegar al internado.
Al cabo de diez minutos estábamos allí en el internado, era muy grande y parecía que lo habían reformado hace poco. El internado estaba cerca de mi casa, andando llegabas en media hora o menos, hoy solamente iba a ver como eran las clases, esta tarde recogía las cosas de la casa y me vendría ya a partir de mañana a dormir.
En cuanto llegué vi a un montón de gente de mi edad, todos tenían un estilo distinto, estaban las pijas de siempre, los heavys, unas con pintas raras, pero de pronto apareció un chico que parecía mas mayor que yo, con pintas de ser un profesor pero jovencito porque llevaba libros y una cartera en la mano. Tenía el pelo castaño, super guapo, nunca había visto una persona así, me quedé fascinada y al pasar por su lado se me quedó mirando con una mirada dulce y con una sonrisa que derretía.
Espero que os guste este tercer capítulo ya mismo publicaré más.
Comentad y seguidme!!!!!
gracias





3 comentarios:

  1. Es muy bonita tu historia. Me ha echo gracia que en las fotos de los personajes de abajo, pongas a Mario Casas como Cristopher. Publica pronto el siguiente capítulo, que tengo ganas de leerlo.

    Un beso*

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  2. Mee encanta tu historia es preciosa, ahora estoy intrigada jejeje.
    Estoy deseando ver el siguiente capítulo.
    Un besazo.

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  3. HHola!! HE COMENZAdo hoy a leerme la historia xq he estado de vacas y es genial.
    Me tienes enganchada!! quiero que me avises cuando subas el prox! un besazo.

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